jueves, 8 de noviembre de 2007

¿hay alguien ahi?

parece que este blog se esta comenzando a resignar por no recibir comentarios... son muy malos los posts?

¿the matrix?... pero si es real!!!

Me siento indignado, aturdido, hastiado. Defraudado creo que no, hace mucho tengo conciencia de que nuestra sociedad es dirigida alevosamente hacia el precipicio. Es realmente humillante ver como los supuestos comunicadores cazan literalmente a las víctimas de cualquier siniestro, bajo el pretexto de llevar la noticia al público. ¿Què clase de ser humano interroga a alguien sobre una tragedia mientras observa el miedo en sus ojos? ¿Es que es ya imposible tratarnos como personas? El mundo comercial, y en general el del capital (ahora supuestamente global) han propiciado con su enorme poder, el que nos veamos los unos a los otros, con unas etiquetas gigantes que ni siquieran contienen nuestros nombres, no, en ellas solo hay precios o acaso la leyenda "DESECHESE" Como decìa el gran Baudrillard, esto que vivimos ya no es real, la hiperrealidad entra por todos nuestros poros y sentidos y se adueña de nuestro modo de vivir, fijando bases, determinando comportamientos, asignando valores y estructurando un mundo vertical y totalitario tan eficientemente que ni siquiera un verdadero despertar de nuestra conciencia nos puede zafar de el. Si todos hicieramos algo unidos... pero preferimos ver la tele.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

...Chiapas...Tabasco...



No deberíamos necesitar de una imagen para animarnos a hacer algo que esta a nuestro alcance, sin embargo esta me pareció representativa de lo que una sociedad bien organizada puede conseguir.¿Porqué no intentamos ser asi de solidarios a diario? Este país padece de un estado anómico profundo y permanente, solo en nosotros esta la respuesta posible a un destino que se cierne sobre nosotros. Ayudemos, sí, ayudemos a diario y por toda causa.

lunes, 22 de octubre de 2007

jueves, 18 de octubre de 2007

miércoles, 17 de octubre de 2007


14 dias...


moving...

El domingo ayude a mis amigos a cambiarse a un departamento que rentaron a otro amigo, estuvimos sacando un mueble que estorbaba en un cuarto, despues de un buen ratote acabe regresandome a mi casa... y todavía no acababan lo del mueble. Espero qu ela cercanía a la que ahora estamos nos permita vernos muuuuy seguido. ES TIEMPO DE FIESTA!!!!

miércoles, 10 de octubre de 2007

ufff...

Tras un examen extraño (para el que me preocupe de más y estuve leyendo el domingo hasta las 12) por fin he podido regresar a un ritmo mas o menos normal, que anuncia con desaparecer hacia la proxima semana. Ademàs una grata sorpresa, parace que ahora cuando menos tiempo tengo he podido hacer algunas cosas mas que lo normal, eso significa.... que el otro dìa me encontré a uno de mis hermanos en el messenger, nunca pero nunca nos podemos ver mas que un rato, y ahora estuvimos platicando de varias cosas (hablando por msn aja claro!) ¿Que sucede en realidad con la comunicación entre las personas? Cada dìa vivimos mas lejos de aquello que deseamos hacer con màs fuerza, la vida más vaga y monotona nos absorbe y qué podemos hacer. estos aparatejos son muy utiles, pero no podemos intercambiar el contacto humano con un teclado de computadora...

viernes, 28 de septiembre de 2007

WOW!!!

No me digan que esto no es una maravilla. Hace mucho tiempo era muy fan de los autos (sigo siendolo) pero ahora tengo menos tiempo y ya no compro revistas de coches hace mucho.

jueves, 27 de septiembre de 2007

CONTINUIDAD DE LOS PARQUES Julio Cortázar

Había empezado a leer la novela unos días antes. La abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los personajes. Esa tarde, después de escribir una carta a su apoderado y discutir con el mayordomo una cuestión de aparcerías, volvió al libro en la tranquilidad del estudio que miraba hacia el parque de los robles. Arrellanado en su sillón favorito, de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra vez el terciopelo verde y se puso a leer los últimos capítulos. Su memoria retenía sin esfuerzo los nombres y las imágenes de los protagonistas; la ilusión novelesca lo ganó casi en seguida. Gozaba del placer casi perverso de irse desgajando línea a línea de lo que lo rodeaba, y sentir a la vez que su cabeza descansaba cómodamente en el terciopelo del alto respaldo, que los cigarrillos seguían al alcance de la mano, que más allá de los ventanales danzaba el aire del atardecer bajo los robles. Palabra a palabra, absorbido por la sórdida disyuntiva de los héroes, dejándose ir hacia las imágenes que se concertaban y adquirían color y movimiento, fue testigo del último encuentro en la cabaña del monte. Primero entraba la mujer, recelosa; ahora llegaba el amante, lastimada la cara por el chicotazo de una rama. Admirablemente restañaba ella la sangre con sus besos, pero él rechazaba las caricias, no había venido para repetir las ceremonias de una pasión secreta, protegida por un mundo de hojas secas y senderos furtivos. El puñal se entibiaba contra su pecho, y debajo latía la libertad agazapada. Un diálogo anhelante corría por las páginas como un arroyo de serpientes, y se sentía que todo estaba decidido desde siempre. Hasta esas caricias que enredaban el cuerpo del amante como queriendo retenerlo y disuadirlo, dibujaban abominablemente la figura de otro cuerpo que era necesario destruir. Nada había sido olvidado: coartadas, azares, posibles errores. A partir de esa hora cada instante tenía su empleo minuciosamente atribuido. El doble repaso despiadado se interrumpía apenas para que una mano acariciara una mejilla. Empezaba a anochecer.Sin mirarse ya, atados rígidamente a la tarea que los esperaba, se separaron en la puerta de la cabaña. Ella debía seguir por la senda que iba al norte. Desde la senda opuesta él se volvió un instante para verla correr con el pelo suelto. Corrió a su vez, parapetándose en los árboles y los setos, hasta distinguir en la bruma malva del crepúsculo la alameda que llevaba a la casa. Los perros no debían ladrar, y no ladraron. El mayordomo no estaría a esa hora, y no estaba. Subió los tres peldaños del porche y entró. Desde la sangre galopando en sus oídos le llegaban las palabras de la mujer: primero una sala azul, después una galería, una escalera alfombrada. En lo alto, dos puertas. Nadie en la primera habitación, nadie en la segunda. La puerta del salón, y entonces el puñal en la mano, la luz de los ventanales, el alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el sillón leyendo una novela.

¿Que gracias a EU el totalitarismo acabó?...o de como una bomba atómica no sirvió para nada

Estaba dando vueltas por ahí y encontré esta maravilla gráfica. ¿O a poco se necesitan más palabras?

,,,

¿Pórque se preocupa uno por pequeñeces? hoy tenía un examen (tonto a más no poder) y ayer anduve pensando si ya sabía todo. Que raro es escribir y ni siquiera saber quien va a leer esto, si es que alguien lo lee. Por lo pronto no tengo que hacer, bueno, si tengo, pero no quiero.

miércoles, 26 de septiembre de 2007